Algún consuelo podrán tener Meche Cabanillas y el Congreso de los pésimos resultados de la última encuesta de CPI en la también fuerte caída de aprobación del Legislativo gringo. Esta andaba por el 30% durante las elecciones de noviembre, donde los demócratas barrieron a los republicanos. Luego subió fuerte hasta raspar el 40%, para luego desplomarse al 25% actual. Y eso que subieron el ingreso mínimo de US$5.15 la hora a US$7.25, si no cómo andarían…
Comparaciones curiosas aparte, realmente es preocupante que menos de un 15% de capitalinos aprueben al Congreso. Esta es una institución que es pilar del sistema democrático y debe por eso ser muy respetada. Lamentablemente, mucha de la gente que ha entrado ha tenido un comportamiento de quinta (violencia en el hemiciclo, contrataciones simuladas, etc.) y éstos son los resultados. Ya volvimos casi al Congrezoo toledista. Voto libre: esa va a ser la única manera de que dejemos de elegir a tanta chauchilla.
-Alan García no debería preocuparse personalmente de las encuestas, salvo trabajar más en el complicado sur.
Toda gestión presidencial sensata y que no sea populista experimenta una “U”. O sea, arrancas alto, caes y te estabilizas y luego subes fuertemente al final de tu mandato, cuando la gente comienza a hacer un balance menos apasionado y compara con lo que se le viene. -Hablando de García, me parece (por lo que oigo aquí) que su agenda para la APEC como moderador principal del foro debe ser abastecimiento de energía (gas, recurso que comparte con Rusia y Australia) y medio ambiente (CO2).
-Los argentinos siempre haciendo lo posible por volver al tercermundismo a pesar de tener un nivel cultural en general más alto que el resto del área.
Esto que Kirchner, caballero que estafó a medio planeta no honrando sus deudas, nomine a su mujer como candidata presidencial –imitando en parte al irresponsable de Perón cuando muy anciano llevó de vicepresidenta a la descerebrada de “Isabelita”– es de Uganda. Sin embargo, tengo la esperanza de que no haya tanto “electarado” y el pueblo argentino rechace esta maniobra por barata (es un nepotismo de última) y reeleccionista (quieren crear la dinastía Kirchner).
Si bien abundan los Giacosas (el patético “fan” de Hugo Chávez) por allá, espero que prime la cordura. No creo que elijan al más capaz (López Murphy), pero por lo menos que Lavagna, a pesar de ser el autor de la estafa a los bonistas, logre imponerse. En todo caso, es más decente que cualquier cosa que salga de esa peste llamada peronismo. Por favor, argentinos, háganse respetar.
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