Columna Diario Correo
Jueves 23 de noviembre de 2006
Por Aldo Mariátegui
1) El APRA ha sufrido un varapalo en las recientes elecciones, por lo que debería repensarse, pero no sólo en términos estrictamente políticos, sino también gerenciales, dado que es básicamente una organización como cualquier otra. Es una vieja marca de mucha recordación y con un personal disciplinado (cada vez menos), pero está pasando por una crisis semejante a la que experimenta actualmente Ford. Su Henry Ford –o sea, Haya– hace tiempo que murió y su Bill Ford actual –o sea, el gerente general Alan García– tiene que arrancar por establecer una visión, una misión y una estrategia. Por ejemplo, la visión de Microsoft es “trabajamos para ayudar a las personas y a las empresas de todo el mundo a desarrollar todo su potencial. En eso consiste nuestra misión”, mientras que la visión de General Motors es “ser el líder mundial en productos de transporte y servicios relativos”, y la estrategia de Shell consiste en “más exploración y refinación-distribución rentables”. ¿Cuál es la misión, visión y estrategia del APRA actual? ¿Alan y el CEN han hecho este ejercicio elemental alguna vez? ¿Por lo menos un análisis FODA (Fuerzas, Oportunidades, Debilidades y Amenazas)? ¿Cuál es su política de ascensos? ¿Su personal está contento? ¿Sus gerentes sectoriales funcionan? ¿Qué tal andan sus mandos medios? ¿Su atención al cliente (el elector) anda bien? ¿Van a relanzar la marca (algo de eso hicieron exitosamente con la campaña de la estrella playera y el reggaetón)? ¿Qué mensaje proyectarán de ahora en adelante? ¿Cómo medirán sus avances? ¿Van a mejorar sus productos? ¿Van a capacitar a su personal? ¿Está descentralizada su producción? ¿Van a una reingeniería? Comenzar por ejemplo con los canales de distribución. La conquista del electorado de la Sierra se da por la radio. Mientras el APRA, a diferencia de la izquierda –y por eso tanto rojito camuflado ha tenido éxito en las recientes elecciones–, no tenga una cadena de radios en provincias, no va a crecer allí. Y lo mismo le aconsejaría a la derecha. Lo trágico, es que esta última no tiene ni siquiera organización o marca.
2) El ministro Garrido-Lecca dijo ayer que había que ser idiota para pensar en privatizar el servicio del agua. Debe haberse referido a que ya el servicio a los más pobres es absolutamente privado, dado que compran idiotamente caro el barril de agua sucia a camiones de empresarios privados. ¡Cuánto daño hizo Fujimori al detener la privatización de Sedapal! Ya todo el mundo tendría agua. Y no habría un Sedapal que hace idioteces, como ese carísimo Interceptor Norte que no sirve para nada porque no hay planta de tratamiento ni colector submarino complementarios. Una “ideota” idiota. El ministro debería denunciar a los que mandaron construir eso. Porque esa obra inútil de seguro que no la hicieron precisamente por idiotas.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario