Borra (y Nores) contra los que se borran (05/06)

Soy partidario de desaparecer el Ministerio de la Mujer, pero su titular Virginia Borra podría hacer desde allí algunas cosas interesantes. Por ejemplo, impulsar que los trámites de adopción sean los más sencillos posibles, para que no tengamos los orfanatos repletos de niñitos que tranquilamente podrían tener un futuro con familias extranjeras, que son las que más buscan infantes para adoptar. El congresista Gonzales Posada hizo algo muy valioso al respecto cuando fue ministro de Justicia, pero ahora se ha quedado dormido. A ver si Luciana León le toma la posta. O hacer campañas educativas para evitar la proliferación de madres solteras.Estudios económicos serios han demostrado que las mujeres jóvenes –sobre todo de bajo nivel cultural y económico– que caen en esta condición no sólo quedan atrapadas en la pobreza, sino que la propagan vía su descendencia (The Economist, mayo 26, pp. 23-25), porque es dificilísimo salir adelante sola con un niño a cuestas. Eso sucede abrumadoramente en la comunidad afro yanqui, donde casi el 70% de las madres solteras no acaban el colegio. Es revelador que el 80% de los pobres estadounidenses se ubiquen en hogares con un solo progenitor (que en el 90% de los casos es la madre). Y allá la cosa se agrava por el individualismo, porque aquí por lo menos se da la solidaridad familiar. Se estima que la pobreza entre los niños afros estadounidenses sería del 28%, en lugar del tercermundista 45% actual. Muchísimo. Y me imagino que estos datos muy fácilmente se extrapolan aquí (¡deben ser peores!), donde un deporte masculino local es hacer hijos y después borrarse. No lo digo por cucufato –que hagan recreativamente con su cuerpo lo que quieran–, pero sí que estén advertidas de este peligro, que repercute tanto socialmente. Este tipo de luchas culturales –similares a la campaña contra la violencia doméstica– son tareas de la ministra de la Mujer (y tal vez también de Pilar Nores). -Increíble que se dé un paro en Iquitos por las exoneraciones tributarias cuando precisamente a esa ciudad… no la van a tocar. Ganas simplemente de fastidiar. Y el presidente regional tacneño –tenía que ser humalista– apañando el contrabando de ropa usada. ¡Kafka sería un escritor costumbrista en nuestro país! Es que fácil este presidente regional tacneño se levanta de su cama convertido en un insecto, como en La metamorfosis. -Nuestro Congreso no me da vergüenza tanto por estas historias patéticas de contrataciones de domésticas y amantes en la planilla pública –al fin y al cabo, simplemente se refleja una nefasta cultura popular que celebra la pendejada– sino mucho más por su mutismo frente a Chávez y su grosera intervención contra RCTV. Hace rato que se ha debido votar una moción expresando por lo menos una “seria preocupación”. Eso me parece mucho más bochornoso que estas baratas pecata minuta. ¡Han quedado como unos batracios!