Desde Melbourne (30/06)

Interesante esta Melbourne, ciudad conocida por su clima extremadamente volátil (ora llueve, ora calienta, ora hiela), por ser cuna del voto secreto y las ocho horas laborales, por ser extremadamente cosmopolita y por haber sido sede de unas Olimpiadas. Dejé atrás a la gélida Canberra, ciudad burocrática, perfecta y aburrida como Brasilia y Ottawa.
Se hizo de la nada ante el impasse de elegir a la capital entre las rivales (¡se detestan!) Sydney y Melbourne. Y se le llamó Canberra, vocablo que en idioma aborigen significa “lugar de reunión” (como Billabong significa “estanque”). Mientras Sydney es mucho más agringada –una suerte de San Francisco–, Melbourne transpira Europa dentro de su casi cerrada bahía.
Nos cuentan que junto a Buenos Aires fue otrora una de las ciudades más ricas (granos, lácteos y oro, mucho oro) y elegantes, pero no tiene nada que ver con la porteña.
Y uno escucha muchas cosas de política internacional –y también otras curiosas– en estas citas pre-APEC. Que China va a firmar un TLC con nosotros porque está básicamente empujando este tipo de arreglos con países mineros. Que Costa Rica acaba de abandonar a Taiwán por China debido a que quiere entrar a la APEC. Que China ha vetado el ingreso de la India a este foro y que con eso ya la bloqueó, porque los acuerdos son por consenso.
Que Japón fue el padrino en este club del Perú bajo Fujimori y que ahora deberíamos buscarnos otro. Que un gran sector de la APEC considera que los países latinoamericanos (México, Chile y Perú) no tenemos nada que hacer allí, que nos metimos por la puerta falsa y que deberían sacarnos. Que la moratoria para el ingreso se prolonga y Colombia no entra. Que qué espera Perú para procurar un TLC con Corea del Sur, lo cual acicatearía a Japón (se tienen bronca) a fin de negociar también con nosotros. Que los chilenos no dejan de decir que quieren que Chile sea un país como Australia en 20 años. Que hoy nació el australiano número 21 millones.
Que Australia es un país donde casi toda su gente vive en las costas. Que Tasmania está bastante lejos del continente. Que Tania Libertad va a cantar en la ópera de Sydney. Que cómo un país minero como Perú no tiene cónsul en Perth. Un diplomático se preocupa mucho cuando le comento que Giampietri –encargado de la APEC Lima 2008– ha sido hospitalizado por el corazón.
Otro me dice que espera que Perú no cometa los dos errores de Vietnam cuando fue anfitrión. O sea, no tener agenda y, de tenerla, ser parroquial. “Allí García va a ser muy importante como el moderador.
Si plantea una agenda interesante para todos y de dos puntos, la reunión será un éxito para Perú.
Recuerden que ustedes los latinoamericanos están con tarjeta amarilla en el grupo, que muchos adentro quieren que la malogren para sacarlos. Pero si plantea aire o una agenda ‘peruana’ o extensa, García va a quedar como un provinciano. Debe ser un estadista global. Esta es APEC. Son ligas mayores”.